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De acuerdo con la organización Greenpeace, México produce cerca de 8 millones de toneladas de plástico al año, de los cuales el 50 por ciento son de un solo uso y sólo un 6.7 por ciento se recicla.
Por ello, el Pleno del Senado de la República avaló el dictamen que reforma la Ley General para la Prevención y Gestión Integral de los Residuos, con el objetivo de revertir el impacto ambiental que general el mal manejo de los residuos plástico.
El proyecto de decreto que se avaló en lo general con 76 votos a favor, uno en contra y tres abstenciones, señala que dichas reformas están encaminadas a reforzar la prevención de la generación, minimización, separación, recolección, aprovechamiento, valorización, acopio y gestión integral de los residuos plásticos.
Asimismo, prevé la eliminación total de los plásticos de un solo uso para 2025, exceptuando aquellos que no pueden ser sustituidos por otros materiales, y plantea prohibir su uso, consumo, comercialización, distribución o ingreso en áreas naturales protegidas o insulares.
Al fundamentar el dictamen, el presidente de la Comisión de Medio Ambiente, senador Raúl Bolaños-Cacho Cué (PVEM) comentó que por medio de la reforma se establece que todos los residuos generados por envases y empaques de plásticos deben estar sujetos a un plan de manejo obligatorio, con metas progresivas, plazos de acopio, reciclaje y acciones preventivas.
En tanto, el presidente de la Comisión de Estudios Legislativos, senador Manuel Añore Baños (PRI) destacó que el dictamen tiene como fin impulsar cambios en la industria y en los patrones de consumo de las personas, para disminuir los efectos negativos al medio ambiente por la producción y desecho de plásticos.
En la discusión en lo general, la senadora María Guadalupe Saldaña Cisneros (PAN) consideró que las reformas a dicho ordenamiento no atienden la exigencia social de resolver el problema del exceso de plásticos en el país, los cuales representan una amenaza contra la biodiversidad y la calidad del suelo, agua y aire.
Por Morena, la senadora Susana Harp Iturribarría manifestó que los residuos deberán de ser parte de planes de manejo obligatorio donde se incluirán el acopio, el reciclaje adecuado, la prevención, reducción y rediseño; además, se incluirán en los planes escolares la educación ambiental para transformar el consumo desde edades tempranas.
“El principal reto no es prohibir las bolsas de plástico, el principal reto es hacer que se utilice menos plástico y, por lo tanto, se tenga que producir menos plástico y esa es la gran virtud de ahora de este dictamen”, afirmó el senador Jorge Carlos Ramírez Marín (PRI).
De acuerdo con el senador Luis David Ortiz Salinas (MC) existe una falta de presupuesto por parte de la federación para atender el problema del plástico, pues “si no hay recurso detrás, esto seguirá siendo una ley que no se cumplirá”.
Por el Grupo Plural, la senadora Nancy De la Sierra Arámburo, consideró que este es el mejor momento para aprobar dicho dictamen, toda vez que deja atrás el modelo lineal de producción, buscando uno nuevo que permita regenerar los sistemas naturales para proteger el medio ambiente.
En la discusión en lo particular, las y los senadores rechazaron las reservas presentadas por diversos senadoras y senadores, por lo que el senador Bolaños-Cacho Cué presentó una “fe de erratas” para establecer que las legislaturas de las entidades federativas deberían adecuar las legislaciones correspondientes en un plazo no mayor a 90 días, la cual tampoco fue admitida.
En la votación de los artículos reservados, se emitieron 52 votos en contra y cuatro abstenciones; al no reunir el quórum legal correspondiente, se levantó la sesión ordinaria y se citó para este jueves 18 de noviembre.
Al iniciar la sesión del 18 de noviembre, el dictamen con proyecto de decreto se aprobó con 71 votos a favor y 16 en contra, por lo que se remitió a la Cámara de Diputados. Al respecto, los Grupos Parlamentarios acordaron presentar una iniciativa para cumplir con el acuerdo de que esta reforma respete los esfuerzos de legislaciones locales.